martes, 7 de abril de 2009

Reflexión




Cuántos tiempo hace que nosotros los Umbandistas venimos siendo castigados por la indignación y revuelta por los que, fomentan ciertamente por espíritus de la ignorancia e intolerantes religiosos, viven atacando nuestra religión.
Los acusan de perjudicar personas, que separemos parejas, que fomentemos uniones a través de hechizos, de que utilicemos sangre, matar animales, que somos anti Cristo y por ahí sigue una interminable lista de maldades, que dicen, practicamos a nuestro bel placer, bajo la influencia “del maligno”, siendo en hipótesis alguna, cualquiera de los absurdos citados anteriormente formen parte de nuestra Religión.
Nos acusan de hacer y que practiquemos esas maldades, sin embargo, el peor es que esos mismos algozes siquiera saben lo que es la Umbanda, la confunden con El Espiritismo o con El Candomblé y hasta con bajas magias.
No saben ellos que la Umbanda es la única religión que, con el pasar del tiempo, tuvo la capacidad, por influencia del mundo espiritual, de agregar las mejores cosas de varias religiones, transformando las buenas experiencias de diversos segmentos religiosos en una única, sin embargo con muchas diversidades.
Tenemos como pilar fundamental , las enseñanzas de Jesus, la belleza y la fuerza de los Orixás africanos, la reencarnación de las religiones Orientales y del Hinduísmo, la lucha y la experiencia del Pueblo Indígena, tenemos las enseñanzas del Espiritismo, todo eso predicado y enseñado insistentemente por las Entidades Espirituales enviadas por Dios, para que con esas enseñanzas consigamos nuestra evolución espiritual y consigamos la práctica de la Caridad.
Pocos de otras religiones tal vez tengan la conciencia que muchos Umbandistas entienden más de las religiones de ellos que ellos mismos, estamos en proceso acelerado de aprendizaje religioso, no importando la vertiente que él sea oriundo.
Cantidad significativa de Umbandistas tiene en sus cabeceras, libros de las más diversificadas religiones, somos conocedoras que necesitamos entender las más diversas maneras que las enseñanzas de Dios se manifiestan.
Difícilmente un verdadero Umbandista, comprometido con la religión, criticará la religión ajena pues él entiende perfectamente que, aún en caminos diferentes, todos tiene la oportunidad de llegar hasta la evolución espiritual y la morada de Dios.
Aceptamos criticas de los no umbandistas desde que esos críticos, como mínimo, sepan a quienes están criticando pues ataques livianos y sin base doctrinaria deben ser ignorados y entregues en las manos de Dios.
Algunos no umbandistas intentan menospreciar los Umbandistas pero no siguen las enseñanzas de su propia religión, cuyos ejemplos de algunos versículos bíblicos abajo dejan claramente demostradas las ganas de Dios










1) I Coríntios 14:33 porque Dios no es de confusión, y sí de paz. Como en todas las iglesias de los santos.

2) Lucas 6:42 “O como puedes decir a tu hermano:
Hermano, me deja quitar la lasca que está en tu ojo, no viendo tú aún la traba que está en los tuyo ? Hipócrita! quita primero la traba de tu ojo; y entonces verás bien para quitar el lasca que está en el ojo de tu hermano.”

3) “Malaquias 2:10 no tenemos nosotros todos el mismo Padre? No nos creó el mismo Dios? Por qué seremos desleales unos para con los otros, profanando la alianza de nuestros padres? “

4) Mateus 7, 1: “No juzguéis los otros, para que no fuerais juzgados, porque con el juicio con que juzgarais, seréis juzgados, y con la medida que midierais seréis medidos”.

5) Tiago 1:26 - Si alguien entre vosotros cuida ser religioso, y no refrena su lengua, antes engaña su corazón, la religión de ese es vana.

La Umbanda y los Umbandistas están estudiando, analizando, practicando, evolucionando y principalmente aprendiendo, pues finalmente, esa es la preparación espiritual orientada por el mundo espiritual, para en un futuro próximo, ella sea la religión convergente y agregando de los más diferentes ramos religiosos y uno de los verdaderos caminos para el encuentro de Dios, no excluyendo nadie que quiera aliarse en esa caminata.

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